CAPÍTULO 3
Pasaron los días y no encontraban información sobre aquel lugar. Aquel punto rojo. Aquel mapa. El 12 de Marzo de 2038, cuando ya habían perdido la esperanza, Lión, que era el que tenía el mapa en su casa, vio algo extraño alrededor de aquel punto. Parecía que esa cosa se alargaba, un flash que representaba aquella señal alargadoa que aparecía en el mapa. No dudó ni un segundo y fue corriendo a llamar a sus amigos. No había estado tan eufórico en toda su vida. Podía tener la pista, la pista que lo desvelaría todo. Fue a por sus amigos y y se los llevó a su casa a explicarles lo que se le había ocurrido. Les dijo a Harley, a Kira y a Smith que había encontrado algo delgado y alargado alrededor del punto.
-Creo que... es el río de lodo-dijo Lion- El que hay cerca de aquí.
Les explicó también que si seguían el río, a lo mejor podían llegar a aquel lugar. Y de nuevo, no les quedaba otra opción más que fiarse de aquel mapa.
Al día siguiente se pusieron en camino, sabiendo que iba a ser un larguísimo trayecto. Cogieron todas sus reservas de agua y de comida y las metieron en una bolsa. Se dirigieron a hacía el comienzo del río, que estaba cerca de allí, e iniciaron la ruta. A medida que iban andando, se fijaban en todo aquel desastre paisajístico que los rodeaba. Aquello les hizo reflexionar. Los humanos eran una especie que solo pensaban en ellos mismos, y casi ninguna persona tenía empatía. Habían destrozado todo. Todo lo bonito. Todas las maravillas que embellecían el mundo. Todo lo que antes eran bonito y verde se había convertido un mundo gris y triste. Un río que antes era brillante y transparente se había convertido en una montaña de lodo y contaminación.
-Es increíble que los humanos, una especie con gran inteligencia haya permitido que esto pase- dijo Kira.- Es horrible.
Todos pensaban lo mismo que ella y asintieron. Y aún había humanos a los que les daba todo igual. Aun había humanos que, con todo lo que habían evolucionado, seguían teniendo los mismos pensamientos que personas de hacía mil años. Y ya no se podía volver atrás. Llevaban una hora andando y se les había pasado rapidísimo el tiempo. De repente, Kira empezó a cantar una canción de cuando eran más pequeños, una canción que sacaron en 2016 y todos se pusieron a cantarla con ella. Fue un momento genial y muy amistoso. eso hizo reunir fuerzas para seguir aquel río con ilusión y emoción. Aunque todo estuviera destruido, ellos estaban unidos.
Siguieron cantando y bailando lo que quedaba de día, hasta que se hizo de noche y ya no veían nada. Decidieron parar a dormir allí mismo, al lado del río. Smith y Harley hicieron el fuego y Kira y Lion hicieron una sopa en el fuego. Cenaron todos muy contentos por haber pasado ese día tan divertido siguiendo el cauce del río. Por unos momentos pudieron olvidar los sucesos tan desagradables de los últimos tiempos. Estaban muy cansados así que se tumbaron en el suelo y cayeron en una largo sueño.
No durmieron extremadamente bien pero, al menos, tuvieron un buen despertar.
-¿Estáis listo para seguir?- Pregunto Smith.
-!Cómo no!- dijo Harley adormilada.
Se levantaron, se sacudieron un poco la arena de la ropa, bebieron un poco de agua y se pusieron en marcha.
Ahora les tocaba un tramo de cuesta. Camino hacía arriba había un montón de piedras, Smith se resbaló y se cayó. Alarmados porque se infectase la herida que se había hecho, sacaron el agua rápidamente y mientras Harley y Lion le lavaban la herida, Kira fue a buscar unas hojas de algún árbol para tapársela. Cuando las encontró, las cogió y rápidamente se las llevó a Smith. Él envolvió las hojas en su dañado brazo y todos quedaron aliviados. Smith estaba bien, pero se había llevado un susto. Entre unas cosas y otras se hizo la hora de comer.
Estaban hambrientos. Esa vez se hicieron unos bocadillos, pero era escasa comida para el hambre que tenían.
Pasaron los días y tenían la misma rutina: andar, comer y dormir. La noche anterior Harley no había dormido y se apoyó en un árbol seco. El árbol empezó a revivir, a ponerse verde y se convirtió en un precioso árbol.
- P...pero que es esto- dijo Harley muy confusa.
- Prueba en otro árbol, a ver si ese también revive- sugirió Smith.
Harley fue a tocar otro árbol y ocurrió lo mismo ¡Todos estaban muy felices! Se puso a revivir todos los árboles que había alrededor del río. Pero justo cuando todo parecía ir genial, comenzó a temblar el suelo como nunca, con mucha fuerza. Smith, Harley y Kira comenzaron a correr hacía adelante pero Lion no se dio cuenta y se puso a correr en sentido contrario. Kira gritó <<¡Lion date la vuelta y corre hacía nosotros!>>. Pero era demasiado tarde. la tierra se fragmentó y Lion se separó de sus amigos; pero no iba a perder la esperanza. Cogió carrerilla y empezó a correr. Corrió como nunca. a una velocidad supersónica. Llegó a tanta velocidad que saltó por la grieta donde se había fragmentado la tierra, y llegó a la otra orilla donde estaban sus amigos. Justo, cuando sus pies tocaron el suelo, el terremoto paró. Estaban sin habla.
-Pero...¿Cómo?- dijo Harley
- Puede que sean vuestros objetos- contestó Smith.- Por ejemplo el anillo de Harley y las zapatillas de Lion-
-Tienes razón- intervino Lion.
Siguieron su camino, sin habla, por el impacto del terremoto. Cuando subían, Kira vio un agujero en el suelo . Entró, encontró una gafas de sol y unos pendientes azules turquesa. Kira y Smith los cogieron minuciosamente. Él se probó las gafas , y ella se puso los pendientes.
-Estoy viendo algo, ¡somos nosotros!. Pero... ¿Qué es eso? !Oh no! Hay un huracán. !Dios santo!, es como si estuviera, si lo presintiera.
-¿Estás diciendo...qué esas gafas te hacen ver el futuro y que en unas horas va a producirse un huracán?- dijo Harley.
Y en efecto, casi estaban llegando ya a su destino, pero ese huracán no se lo iba a poner fácil.
Acordaron hacer un agujero grande en el suelo, meterse e intentar que el huracán no les afectase. Aun tenían tiempo, no emplearían más de dos horas en hacerlo.
-Queda una hora, aun nos da tiempo de comer algo- dijo Smith.
Sacaron la comida y el agua, una gota salpicó y llegó a caer en los pendientes que encontró Kira, y de repente comenzó a flotar su cuerpo, aún así podía controlarlo.
-¡Estoy volando!-dijo Kira
-Esto es impresionante- pensó de nuevo Kira.
-¡Kira!, el huracán es dentro de cinco minutos-gritó Smith
Ella bajó y todos se metieron en el agujero. Comenzó a levantarse una ventisca tremenda. se agacharon y cerraron los ojos del miedo que recorría sus cuerpos. En unos pocos minutos, el huracán ya había pasado. Al salir se encontraron frente a una gran montaña.
-Hemos llegado- dijo Smith impresionado-
Al fin , todos tenían la boca abierta. Subieron corriendo. Les daba igual el cansancio. Aunque tardasen una hora en subir esa montaña, no iban a parar. Cuando llegaron a la cima estaban eufóricos . Habían pasado por tantas cosas. Caídas, terremotos, huracanes.....Pero siempre se habían levantado. Lo habían conseguido, y juntos. Era una montaña preciosa, llena de vegetación. Por primera vez en dos años lo veían todo tan verde... Y tenían miedo de perder esa preciosa reserva. No podían dejar que esos jóvenes tirasen otra bomba allí. Tenían que encontrarlos antes de que fueses demasiado tarde.
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-Creo que... es el río de lodo-dijo Lion- El que hay cerca de aquí.
Les explicó también que si seguían el río, a lo mejor podían llegar a aquel lugar. Y de nuevo, no les quedaba otra opción más que fiarse de aquel mapa.
Al día siguiente se pusieron en camino, sabiendo que iba a ser un larguísimo trayecto. Cogieron todas sus reservas de agua y de comida y las metieron en una bolsa. Se dirigieron a hacía el comienzo del río, que estaba cerca de allí, e iniciaron la ruta. A medida que iban andando, se fijaban en todo aquel desastre paisajístico que los rodeaba. Aquello les hizo reflexionar. Los humanos eran una especie que solo pensaban en ellos mismos, y casi ninguna persona tenía empatía. Habían destrozado todo. Todo lo bonito. Todas las maravillas que embellecían el mundo. Todo lo que antes eran bonito y verde se había convertido un mundo gris y triste. Un río que antes era brillante y transparente se había convertido en una montaña de lodo y contaminación.
-Es increíble que los humanos, una especie con gran inteligencia haya permitido que esto pase- dijo Kira.- Es horrible.
Todos pensaban lo mismo que ella y asintieron. Y aún había humanos a los que les daba todo igual. Aun había humanos que, con todo lo que habían evolucionado, seguían teniendo los mismos pensamientos que personas de hacía mil años. Y ya no se podía volver atrás. Llevaban una hora andando y se les había pasado rapidísimo el tiempo. De repente, Kira empezó a cantar una canción de cuando eran más pequeños, una canción que sacaron en 2016 y todos se pusieron a cantarla con ella. Fue un momento genial y muy amistoso. eso hizo reunir fuerzas para seguir aquel río con ilusión y emoción. Aunque todo estuviera destruido, ellos estaban unidos.
Siguieron cantando y bailando lo que quedaba de día, hasta que se hizo de noche y ya no veían nada. Decidieron parar a dormir allí mismo, al lado del río. Smith y Harley hicieron el fuego y Kira y Lion hicieron una sopa en el fuego. Cenaron todos muy contentos por haber pasado ese día tan divertido siguiendo el cauce del río. Por unos momentos pudieron olvidar los sucesos tan desagradables de los últimos tiempos. Estaban muy cansados así que se tumbaron en el suelo y cayeron en una largo sueño.
No durmieron extremadamente bien pero, al menos, tuvieron un buen despertar.
-¿Estáis listo para seguir?- Pregunto Smith.
-!Cómo no!- dijo Harley adormilada.
Se levantaron, se sacudieron un poco la arena de la ropa, bebieron un poco de agua y se pusieron en marcha.
Ahora les tocaba un tramo de cuesta. Camino hacía arriba había un montón de piedras, Smith se resbaló y se cayó. Alarmados porque se infectase la herida que se había hecho, sacaron el agua rápidamente y mientras Harley y Lion le lavaban la herida, Kira fue a buscar unas hojas de algún árbol para tapársela. Cuando las encontró, las cogió y rápidamente se las llevó a Smith. Él envolvió las hojas en su dañado brazo y todos quedaron aliviados. Smith estaba bien, pero se había llevado un susto. Entre unas cosas y otras se hizo la hora de comer.
Estaban hambrientos. Esa vez se hicieron unos bocadillos, pero era escasa comida para el hambre que tenían.
Pasaron los días y tenían la misma rutina: andar, comer y dormir. La noche anterior Harley no había dormido y se apoyó en un árbol seco. El árbol empezó a revivir, a ponerse verde y se convirtió en un precioso árbol.
- P...pero que es esto- dijo Harley muy confusa.
- Prueba en otro árbol, a ver si ese también revive- sugirió Smith.
Harley fue a tocar otro árbol y ocurrió lo mismo ¡Todos estaban muy felices! Se puso a revivir todos los árboles que había alrededor del río. Pero justo cuando todo parecía ir genial, comenzó a temblar el suelo como nunca, con mucha fuerza. Smith, Harley y Kira comenzaron a correr hacía adelante pero Lion no se dio cuenta y se puso a correr en sentido contrario. Kira gritó <<¡Lion date la vuelta y corre hacía nosotros!>>. Pero era demasiado tarde. la tierra se fragmentó y Lion se separó de sus amigos; pero no iba a perder la esperanza. Cogió carrerilla y empezó a correr. Corrió como nunca. a una velocidad supersónica. Llegó a tanta velocidad que saltó por la grieta donde se había fragmentado la tierra, y llegó a la otra orilla donde estaban sus amigos. Justo, cuando sus pies tocaron el suelo, el terremoto paró. Estaban sin habla.
-Pero...¿Cómo?- dijo Harley
- Puede que sean vuestros objetos- contestó Smith.- Por ejemplo el anillo de Harley y las zapatillas de Lion-
-Tienes razón- intervino Lion.
Siguieron su camino, sin habla, por el impacto del terremoto. Cuando subían, Kira vio un agujero en el suelo . Entró, encontró una gafas de sol y unos pendientes azules turquesa. Kira y Smith los cogieron minuciosamente. Él se probó las gafas , y ella se puso los pendientes.
-Estoy viendo algo, ¡somos nosotros!. Pero... ¿Qué es eso? !Oh no! Hay un huracán. !Dios santo!, es como si estuviera, si lo presintiera.
-¿Estás diciendo...qué esas gafas te hacen ver el futuro y que en unas horas va a producirse un huracán?- dijo Harley.
Y en efecto, casi estaban llegando ya a su destino, pero ese huracán no se lo iba a poner fácil.
Acordaron hacer un agujero grande en el suelo, meterse e intentar que el huracán no les afectase. Aun tenían tiempo, no emplearían más de dos horas en hacerlo.
-Queda una hora, aun nos da tiempo de comer algo- dijo Smith.
Sacaron la comida y el agua, una gota salpicó y llegó a caer en los pendientes que encontró Kira, y de repente comenzó a flotar su cuerpo, aún así podía controlarlo.
-¡Estoy volando!-dijo Kira
-Esto es impresionante- pensó de nuevo Kira.
-¡Kira!, el huracán es dentro de cinco minutos-gritó Smith
Ella bajó y todos se metieron en el agujero. Comenzó a levantarse una ventisca tremenda. se agacharon y cerraron los ojos del miedo que recorría sus cuerpos. En unos pocos minutos, el huracán ya había pasado. Al salir se encontraron frente a una gran montaña.
-Hemos llegado- dijo Smith impresionado-
Al fin , todos tenían la boca abierta. Subieron corriendo. Les daba igual el cansancio. Aunque tardasen una hora en subir esa montaña, no iban a parar. Cuando llegaron a la cima estaban eufóricos . Habían pasado por tantas cosas. Caídas, terremotos, huracanes.....Pero siempre se habían levantado. Lo habían conseguido, y juntos. Era una montaña preciosa, llena de vegetación. Por primera vez en dos años lo veían todo tan verde... Y tenían miedo de perder esa preciosa reserva. No podían dejar que esos jóvenes tirasen otra bomba allí. Tenían que encontrarlos antes de que fueses demasiado tarde.
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